Toro garantizará el suministro de agua con otras cuatro potabilizadoras

El Ayuntamiento recomendará no consumir la del grifo aunque se declare apta, porque los análisis sobre el arsénico “pueden cambiar en horas”

El Ayuntamiento instalará cuatro plantas potabilizadoras más en distintos puntos de la ciudad de Toro para garantizar el abastecimiento a la población, mientras perdure el problema de contaminación del agua de la red municipal por el elevado índice de arsénico que contiene. Así lo ha confirmado el alcalde, Tomás del Bien, quien ha asegurado que las cuatro plantas potabilizadoras que instalará el Ayuntamiento se sumarán a las tres que el pasado mes de diciembre suministró la Diputación Provincial.

Destacó el mandatario municipal que, ante la previsión de que el problema de contaminación por arsénico pueda prolongarse, el Ayuntamiento ha decidido instalar cuatro plantas potabilizadoras más, con el objetivo de “facilitar” a los ciudadanos una mayor cercanía al suministro de agua potable.

Tras realizar un estudio sobre los emplazamientos más idóneos para una mejor distribución del recurso hídrico, como señaló Del Bien, las cuatro nuevas plantas potabilizadoras portátiles serán instaladas en la plaza del Templo, en el barrio de Antona García, el Mercado de Abastos y la carretera de Medina de Rioseco, en el entorno de la estación de autobuses de la ciudad. Las cuatro plantas potabilizadoras se sumarán a las que ya están en funcionamiento en la actualidad en la plaza de San Francisco, la Plaza Mayor de Tagarabuena y el barrio del Canto, junto al parque “Jesús López Cobos”.

Plazos

Tras concluir el estudio para elegir las mejores ubicaciones para las cuatro nuevas plantas potabilizadoras, el Ayuntamiento contactará la próxima semana con la misma empresa que ha suministrado las instaladas por la Diputación y, en principio, podrían comenzar a funcionar antes de que concluya el mes de enero.

La decisión de instalar cuatro plantas potabilizadoras más responde, como reconoció el alcalde, a que el problema generado por la contaminación del agua “se va a alargar” y la solución definitiva, que pasa por la construcción de una planta potabilizadora junto a los dos sondeos con los que cuenta la ciudad para el suministro de agua, podría demorarse al menos tres meses.

En este punto, precisó que, aunque el Ayuntamiento está intentando agilizar la redacción del proyecto, posteriormente será necesario convocar el proceso de licitación, al que seguirá la ejecución de las obras de construcción de la planta potabilizadora.

Del mismo modo, Del Bien apuntó que, aunque los continuos análisis que se realizan para comprobar el índice de arsénico que contiene el agua de la red municipal arrojen un parámetro inferior al máximo permitido por ley, 10 microgramos por litro, el Ayuntamiento recomendará a los ciudadanos que sigan utilizando las plantas potabilizadoras.

Y es que, como reconoció, los resultados de los análisis del agua de la red municipal de abastecimiento son “muy volubles” y, en pocas horas, “pueden variar” en cuanto al nivel de arsénico. Además, aclaró que en el momento en el que tres análisis consecutivos arrojen un resultado del índice de arsénico inferior al permitido, por ley, el Ayuntamiento está obligado a declarar de nuevo el agua apta para el consumo, pero solicitará a los vecinos que sigan ingiriendo la recogida en las potabilizadoras portátiles.

Por otra parte, Del Bien precisó que el Ayuntamiento de Toro también realizará un nuevo “pedido” de agua embotellada, para garantizar el abastecimiento a personas mayores o con discapacidad. Los voluntarios de la agrupación de Protección Civil seguirán distribuyendo agua embotellada entre colectivos vulnerables que tienen dificultades para desplazarse hasta las plantas potabilizadoras mientras persista el problema de contaminación. Alrededor de 300 hogares de Toro dependen del reparto de botellas de agua que realiza Protección Civil.